* Horizonte * La tierra por la que andamos y el cielo que nos cobija se perciben separados cuando a lo cercano miras. Son dos planos diferentes del quehacer de cada día; combinarlos favorece la amplitud de nuestras vidas. De ella se nutren los cuerpos y en él la mente respira, cómo poder separarlos si en ambos mi ser se ubica. La línea del Horizonte nos dice que están unidos, que entre la tierra y el cielo no existe espacio vacío. No vemos en lo cercano de la Vida su atractivo, percibiendo que carece de hermosura y de sentido. Todo parece arbitrario, nada ofrece buen abrigo al corazón que deambula alejado de sí mismo. El sí mismo es el presente, el instante en que vivimos, el aquello que contiene cuanto preciso vivirlo. Lo lejano es el futuro, algo aún no sucedido, algo que habita en los sueños, en lo que en mi mente ansío. La belleza que contiene, si es que belleza percibo, es aquello que debiera concebir que está conmigo. El Horizonte que observo, esa puerta al infinito, es el reflejo en que el alma se muestra ante mis sentidos. |
martes, 22 de noviembre de 2011
Poema: "Horizonte"
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